El Centro Galáctico representa lo que Jung describió como el Sí-mismo, el cual emerge de la totalidad de la psique (subconsciente, consciente, supraconsciente) y al mismo tiempo controla y reorganiza la actividad de las partes. Debido a que la actividad del Sí-mismo es en cierto modo consciente, también se le suele llamar Yo Superior o Conciencia Superior. Es el centro organizador que regula el desarrollo psíquico, a través del cual se produce el proceso de individuación.
El Centro Galáctico también representa lo que Annie Marquier describió como el Alma, que se encarga de atraer y coordinar los distintos elementos de nuestra vida de acuerdo con el Plan de Evolución individual. Este plan está diseñado en función de nuestro pasado kármico y nuestro potencial futuro, y se actualiza a cada momento en función del proceso de aprendizaje.
